Palenque que en realidad significa «Bakal-Ham» (muchas aguas) es una ciudad del estado mexicano de Chiapas. Miles de personas llegan allí para visitar la zona arqueológica de Palenque, las cascadas de Misol-Ha, Agua Azul y Agua Clara. La población de Palenque, se dedica en un gran porcentaje a las actividades agropecuarias, en un menor porcentaje a la industria de la transformación y al comercio. Los grupos más importantes de indígenas que la habitan son choles, tzeltales y lacandones.

 

 

 

Nosotrxs tuvimos la oportunidad de visitar dos veces la ciudad de Palenque. En la primera ocasión nos quedamos en Panchan, un complejo turístico administrado por 5 familias, lo elegimos sobre todo, por la cercanía con la zona arqueológica (a un costado de la entrada) La verdad que el lugar es muy bello, estas en el medio de la selva y todo es muy rustico, pero lo malo es que para nuestro presupuesto ES MUY CARO! Hospedarte allí compartiendo la habitación con 6 personas más te termina saliendo lo mismo que una habitación privada (del mismo tamaño) en la ciudad de Palenque y estas supeditado a comer lo que ofrece el único restaurante que allí hay, de buscar otra opción tienes que dirigirte al pueblo que se encuentra a 10 km.

La primera vez que fuimos además, era temporada alta, por lo que la zona arqueológica era un desmadre de gente, esa vez no fuimos a visitar la antigua ciudad maya (por suerte) yo me fui de Palenque con una terrible insatisfacción pero a la larga el resultado fue mejor, puesto que la segunda vez que allí estuvimos encontramos la ciudad casi despoblada y la visita a las ruinas casi sólo para nosotrxs. En la segunda oportunidad conocimos a Valérie, Julien y Kevin y acabamos por ir todxs juntos caminando hasta la zona arqueológica desde la ciudad de Palenque. La verdad no tengo idea cuánto tiempo nos llevó la caminata porque la charla era amena y de lo más entretenida así que el camino se nos hizo corto.

 

 

>>> Relacionado: Tres cascadas imperdibles de Chiapas <<<

 

 

 

Sobre las colinas de la Sierra Madre de Chiapas en el límite con la llanura costera del Golfo de México (en medio de un paisaje de selva alta y con abundancia de agua en superficie) se fundó Palenque como una aldea dedicada a la agricultura.

 

 

Los restos arquitectónicos y escultóricos del sitio corresponden al período conocido como Clásico Tardío (600 – 900 d.C.)

Sin embargo, se han recuperado materiales arqueológicos que indican que los comienzos de Palenque se remontan por lo menos al año 100 d.C.

 

 

Palenque fue, junto con Tikal y Calakmul, una de las ciudades más poderosas del Clásico Maya, sede de una de las dinastías más notables a las que pertenece Pakal. Como todas las ciudades mayas del clásico, Palenque se relacionó con otras a través de redes comerciales de intercambio o alianzas entre grupos de gobernantes. El territorio se organizaba a partir de la existencia de ciudades estado, cuyos centros han sido identificados por la presencia del llamado glifo emblema, pero la base de esta organización: intercambio, alianzas y por supuesto la guerra, supone una movilidad constante de la misma.

 

 

 

>>> Relacionado: 5 lugares mágicos y poco conocidos de Chiapas <<<

 

 

Las inscripciones mayas han sido ampliamente estudiadas por ser una de las primeras manifestaciones de escritura en Mesoamérica con un alfabeto logo-silábico, y por sus sistemas calendáricos: uno cíclico (como en la mayoría de Mesoamérica) y otro lineal  (llamado cuenta larga)

 

 

El área descubierta hasta la actualidad abarca 2,5 km², pero se estima que sólo se ha explorado un 10% de la superficie total que alcanzó la ciudad, permaneciendo aún más de mil estructuras cubiertas por la selva.

 

 

>>> Relacionado: 10 cosas que vamos a extrañar de San Cristóbal de Las Casas <<<

 

 

La observación que tengo para hacer respecto de Palenque es referente al turismo hegemónico, con la oleada marketinera respecto al cambio de ciclo maya, y como resultado de la avanzada de la “new age” de conectarse con “el ser” de manera superflua, se ha explotado la filosofía maya para el beneficio de unxs pocxs. En la misma línea de pensamiento se genera un mensaje contradictorio que plantea deforestar la selva para construir “eco-hoteles” (cosa de locxs, no?)Por eso yo apelo a la conciencia de los viajerxs!

 

 

Realmente la zona de Palenque es un lugar increíble, les recomiendo que para recorrerlo bien, comiencen el recorrido bien temprano por la mañana. Es muy fácil llegar y perfectamente posible llegar hasta el mismo caminando (son algo de 12 km) Eso sí! No se olviden de llevar agua.

 

INFORMACIÓN ÚTIL:

 

Zona Arqueológica abierta de martes a domingo de 8 a 16 hs.

Precio de acceso al Parque Nacional: 27 pesos mexicanos (2 dólares)

Precio de acceso a la zona Arqueológica: 59 pesos mexicanos (4 dólares aprox) Incluye la visita al Museo de sitio.

Para más información aquí dejamos el valor oficial de las entradas a las zonas arqueológicas en todo el territorio mexicano visitar la página del INAH

 

Consejo útil: No contraten tour, tanto la zona arqueológica como las cascadas de Misol Ha y Agua Azul se pueden visitar e manera económica si la visitan por su cuenta. Les recomiendo que hagan la caminata hasta la zona arqueológica, eso sí, lleven agua!

 

La Perlita: Muy cerca de la ciudad de Palenque y en tierra zapatista se encuentran las Cascadas Roberto Barrios, como el lugar no está tan explotado turísticamente como los otros lugares nombrados. La entrada al lugar cuesta 10 pesos mexicanos! y el lugar recuerda mucho a Semuc Champey. Para llegar hasta dicho lugar se toman una combi por 50 pesos mexicanos (salen al costado del mercado). NO SE LO PIERDAN