Hogar dulce Hogar
Luego de estar por más de 21 meses viajando y próximos a cumplir 2 años de haber comenzado “el viaje” llega un momento en que, por lo menos a nosotrxs, nos hace falta parar, bajar el ritmo y comenzar a procesar con más calma el camino recorrido… surge la necesidad de sentir el calor de un hogar dulce hogar…
San Cristóbal de las Casas fue la primera ciudad a la que arribamos luego de la ciudad fronteriza de Tapachula, y una ciudad a la que regresamos en reiteradas ocasiones. Dos meses atrás, estando en el DF y tratando de decidir cómo seguíamos y hacia dónde? Nos dimos cuenta que necesitábamos un lugar para parar un tiempo, movernos a otros lugares, pero sabiendo que teníamos un lugar base. Las opciones eran: alguna playa de Oaxaca o alguna ciudad de Chiapas en las montañas. Acabamos por elegir San Cristóbal, tal vez porque ahora en Oaxaca es temporada muy baja, y lo que dificulta encontrar alguna manera constante de hacer dinero. Yo que venía de vivir en Amatlán rodeada de montañas mágicas, dije montañas allá vamos! Y así llegamos a San Cris, más por impulso o intuición que otra cosa.
Desde que llegamos a esta ciudad con alma de pueblo, todo se fue dando solo: encontrar proyectos de eco-construcción, huertas orgánicas, introducirnos en la vida en una comunidad, donde vivir, TODO se nos dio (y se nos sigue dando). Así fue como dimos, entre otras cosas con Gaby (no yo, otra) también argentina y actriz, que resulta se iba por 5 meses de vuelta a sus pagos y quedaba su casa y sus mascotas sin nadie que lxs cuide. Y de pronto nos dimos cuenta que estábamos en nuestra primera experiencia de Housesitters. La casa nos encantó desde el primer momento en que la conocimos, con las mascotas nos llevamos bien desde siempre y amo a cualquier especie animal (basta decir que cuando vivía en el campo llegué a tener 25 gatxs a la vez) y al conocer a estos dos perrxs y este gatito dijimos: Sí!
No recordaba la sensación de tener un hogar y la falta del mismo, hasta que volví a habitar uno. Apropiarme de un espacio, hacerlo mío. Los primeros días en la casa sólo me dediqué a limpiar, tuvieron que pasar unos días para que notara que no había sacado nada, absolutamente nada de la mochila. Esta casa, este barrio, esta ciudad se convirtieron en nuestro hogar.
En estos meses aprovecharemos para relajarnos (en parte) y empezar con calma a programar para los primeros meses del año que viene nuestra vuelta por tierra desde México a Argentina, vuelta que decidimos será en bicicleta y con proyecto ecológico de por medio (ya contaremos bien el qué, cómo, cuándo y el para qué) Sabemos que aún nos queda mucho por ver y aprender en y de México, y como la noción de días, meses y años ha cambiado por completo para nosotrxs, no tenemos apuro alguno. Por lo pronto las calles en subidas y bajadas del más famoso de los pueblos mágicos mexicanos, nos están siendo de gran ayuda para ponernos en forma y a tono.
No es un mientras tanto, esto es parte de «el viaje», esto es aprender a viajar lento, o mejor dicho a la velocidad necesaria para caer en los detalles 🙂
Te sumas?
- YouTube
- Suscribiéndote al blog para recibir en tu casilla de e-mail las nuevas publicaciones (no olvides confirmar las suscripción en tu bandeja de entrada)
Gracias por visitarnos!
Sorry, the comment form is closed at this time.
Coqui
Yupiii! Felicitaciones. Muy chida la casa y linda aventura la de la bici 🙂 Los extrañoo!! Un abrazo enorme
Plan B Viajero
Muchas gracias Coqui, ya sabes que acá puedes caer cuando quieras, no vemos tan pronto nuestras piernas nos permitan o tu agenda 🙂
Juan Manuel
Qué lindo!
Cuántas veces pienso si eso me pasará algún día. Si estando de viaje necesite una casa. Pero más allá de preguntas y respuestas, alguna vez se me cruzó por ahí, leyéndolos a ustedes y a los Kombi, que México podría ser un lugar para parar si la vida me llevó a rumbear por ahí y el cuerpo-mente pide hogar de ladrillos!
Les mando un abrazo enorme!!!
Plan B Viajero
Hola Juan Manuel! Gracias por escribir! Claramente México (y sobre todo Chiapas y Oaxaca) son lugares que dan para decir: acá yo me quiero quedar un tiempo. Ya sabes por donde caer jajaj.
Abrazo enorme para vos también!
Saludos!
Eredy
He Camo, buen Blog 😀 que andes bien, pasate a la huerta del argentino, las hamburguesas esperan.
Plan B Viajero
Gracias, mañana me paso bro
Pingback: San Cristóbal de Las Casas | planbviajero
Pingback: Un parche para la rueda
Pingback: Cómo hacer tu propia bici de bambú - Plan B Viajero
Pingback: Año nuevo Zapatista