¿Alguna vez se enfermaron viajando?
Entre las preguntas frecuentes que recibimos está si alguna vez nos enfermamos y como resultó.
En este post te queremos compartir esos momentos del viaje en que la salud nos jugó una mala pasada.
Errando se aprende
Comienzo del viaje, éramos 4 vajando. No teníamos miedo a enfermarnos, porque estábamos seguros que «eso» no nos pasaría a nosotros. Estábamos recién llegados a Potosí (Bolivia) y al segundo día de nuestra llegada, Camilo comienza con vómitos y diarrea. Dos días más tarde le sigo yo. Ninguno de los dos teníamos asistencia al viajero. Nos atendimos en el hospital público, donde intentaron cobrarnos hasta el último pedacito de algodón, Camilo quedó internado. Estuvimos una semana sin poder salir del hostal.
Diagnóstico: Salmonella.
Recibimos el año nuevo en el hostal, comiendo arroz hervido y té. Brindamos con agua embotellada y nos divertimos un montón. Tres días después, cuando ya estábamos mejor fuimos a Uyuni, y les da salmonella a nuestros dos amigxs. Como ellos sí tenían seguro de viaje, se atendieron enseguida y lo suyo no pasó a mayores. No termino de entender qué me provocó salmonella, pero luego de eso evite comer en la calle.
Conclusión: Nos volvimos más precavidos con lo que comíamos.
Lo que no te mata, te fortalece
Estábamos en Huanchaco (Perú) y comencé a sentirme mal del estómago. Un día antes, había comido pescado (por aquel entonces todavía comía pescado) Nuevamente vómitos, fiebre, y un dolor insoportable en el estómago (tanto que no podía ni tomar agua).
Tuve que ir hasta Trujillo a hacerme atender, para colmo esa misma noche viajábamos hasta Máncora en un autobús de segunda (es decir, los más baratos) No me quedo otra que tomarme una pastilla de carbón y aguantarme las ganar de vomitar durante todo el viaje. Llegué destrozada a destino, estuve dos días tirada en la cama tomando electrólitos y pastillas, mientras lxs chicxs disfrutaban de la playa. Diagnóstico: Un virus en el pescado (según dijo el médico que me atendió)
Conclusión: Los electrólitos son un asco (sobre todo el que tuve que tomar: sabor anís) pero son esenciales para luchar contra la deshidratación.
A falta de pan, buenas son las tortas
Estábamos en Flores (Guatemala) lugar al que habíamos llegado para ir a visitar la Zona Arqueológica de Tikal. Conocimos a dos chicas buena onda y nos fuimos juntxs en busca de comida. Comimos empanadas de papa y como desconfiábamos de la procedencia del agua de sabor, compramos embotellada. A la madrugada lxs cuatro estábamos con un dolor horrible en el estómago. Diagnóstico: algo de la comida nos cayó mal.
Conclusión: Gastamos mucho dinero en medicamentos, y no pudimos visitar Tikal 🙁
Alguna vez se enfermaron viajando? sí, nos enfermamos. Con el tiempo aprendimos a sobrellevar mejor los inconvenientes sin desesperarse: lo que pasó en Bolivia es algo bastante común, lo que me pasó en Guate tampoco me desesperó, no conocí Tikal pero tuve la suerte de conocer Palenque (además de otras tantas zonas arqueológicas) Por suerte nunca pasó a mayores, tampoco (hasta ahora) nunca nos accidentamos (toco madera) Aprendimos a cuidarnos más, como por ejemplo: hervir SIEMPRE el agua (hasta para el mate) lavar bien frutas y verduras (con bicarbonato primero y luego con DG6) Si tenemos las defensas bajas sabemos que estaremos más expuestxs a algún virus que ande dando vueltas. No hay que estar paranoicxs, siempre es mejor mantener la calma. No dejé de comer en la calle, pero sí presté más atención adonde iba a comer y en que condiciones estaba el lugar y la comida. Nosotrxs aún no contamos con seguro de viaje, pero lo estamos considerando para nuestra aventura en bicicleta de México a Argentina 🙂
Lo que recomendamos
- Tengan consigo SIEMPRE un botiquín de primeros auxilios, los va a ayudar en más de una oportunidad.
- Si te genera desconfianza no bebes agua del grifo (canilla) sino embotellada, puede prevenir diarreas y otras enfermedades.
- Mantener una buena higiene corporal, y lavarse con frecuencia bien las manos con jabón antiséptico.
- Investiguen en los sitios oficiales del país a visitar que vacunas necesitan. Y lleven dentro del pasaporte el papel que certifique que se las dieron.
- Dense la vacuna contra la fiebre amarilla: Nosotrxs nos la dimos en Buenos Aires (gratis) y nos la pidieron a la salida de Panamá y en la entrada a Costa Rica. Llevo pagado el certificado en la última hoja del pasaporte. Pueden ver la dirección AQUÍ-
- Contraten un seguro de viajes. Nosotros aprendimos por las malas que es mejor contar con asistencia al viajero.
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Whiteliphant
Uy pero que suerte les toco! Nosotras que anduvimos 5 meses por pueblos, sierra, ciudades y todo lo de en medio nunca nos cayo nada mal. Pero que bueno que encontraron soluciones y ya tienen planificado como prevenir!
Plan B Viajero
jajaja, si! Igual tres veces en dos años, no es nada! Son cosas que pasan 🙂
Saludos!
Whiteliphant
Saludos 🙂
Raul
Hola muy interesante blog. Yo me enferme en Villazon, justo cuando había cruzado la frontera. Comí el famoso pollo frito y pum, me enferme en el camino a Potosí gracias a las miles de curvas y a la destreza en la conducción de los chóferes. Saludos cordiales
Plan B Viajero
Hola Raul! muchas gracias! uff que bajón, te entendemos perfectamente jeje.
Saludos 🙂
Vinicunca Peru
¡Hola Gabriela y Marcos! Yo tuve la mala suerte de enfermarme durante en mi viaje a Peru era mi primer viaje que realizaba. A Peru arribe todo bien, pero al llegar a la ciudad del Cusco la lluvia llovía muy fuerte entonces nos mojó, a causa del mojón me dio gripe y tos entonces eso fue lo que ocurrió, ya se imaginaran como fue el viaje. luego un día nos tocaba hacer camino inca hacia Machu Picchu y no podía pasar algo peor, huf el “mal de altura” eso sí que arruino mi viaje.
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